Vete de
mi mente por favor, ya no te quiero más allí. No sabes los destrozos que me
provocas, te detesto. Haz hecho que pierda mi control. Yo solo tengo dos formatos:
tranquilidad o desenfreno. Los puntos medios me molestan, no estoy hecha para
ellos. Son sosos, sin sentido y mediocres. No puedo estar cerca de ti y no desear tocarte. Aquí me tienes en un punto medio por ti, así que por favor, vete de mi
mente.
Te veo
y no sé cómo actuar. Esto me
roba la paz. Detrás de la sonrisa y los ojitos maquillados se esconde un
torbellino de sentimientos que quiere salir y cambiarte tu vida 180 grados. Claro que estuviera dispuesta a hacerlo.
Me pones
nerviosa. Me pones sonriente. Eres el primer hombre por el cual deliberadamente
busco una y otra vez cuál es la ropa que mejor me favorece. Quisiera saber cómo
te agrado más, quisiera complacerte. Quisiera poder decirte una y mil veces lo
mucho que me gustas, que eres imposiblemente guapo y el dueño de una sonrisa que me cautiva, con unos ojos sinceros y agradables. Hablas con una pasión que me deja sin aliento. Quiero coquetearte de una manera descarada.
Una noche de estas fue la mejor y peor de mi vida. Estuvimos en una de esas reunioncitas que nos unen. Pizza, cervezas y plática. Intentaba acercarme a ti lo más posible hasta que por fin lo conseguí. Cabelloroso como siempre me acercaste una silla y luego te sentaste junto a mí. Todo iba según mi plan hasta que me comentas en voz alta que la señorita que pasaba al lado estaba guapa. El baldazo de agua fría aún no termina de caer sobre mí. De un comentario a otro terminé diciéndote que yo te veía menor a tu edad. Con una amplia sonrisa me lo agradeciste mientras tu mano tocaba por primera vez mi rodilla. Me sentí electrocutada. Me gustó como se sentían tus manos sobre mí aunque fuera por un segundo. Fue la primera vez que me tocabas espontáneamente y grabe ese recuerdo para toda mi vida. Seguimos bromeando de una y otra cosa. Varias veces aprovechaste para tocarme la rodilla, pasar tus manos por mi espalda intentando calmarme después mientras yo enrollaba mis ojos cuando alguien usaba en vano la palabra libertad. Dos veces mientras me sonreías en broma me empujabas a un lado. Intercambiamos un par de sonrisas cómplices mientras platicábamos. Te metiste en mi espacio personal como quien lo ha hecho toda la vida y se sintió natural. Me hicieron ver que has sido el primero de ese grupo de hombres con los que me reúno a complotar por la libertad que lo hace. Nota que con varios de ellos nos tenemos mucha confianza. Tambien eres el primero que quiero que siempre lo haga.
Una noche de estas fue la mejor y peor de mi vida. Estuvimos en una de esas reunioncitas que nos unen. Pizza, cervezas y plática. Intentaba acercarme a ti lo más posible hasta que por fin lo conseguí. Cabelloroso como siempre me acercaste una silla y luego te sentaste junto a mí. Todo iba según mi plan hasta que me comentas en voz alta que la señorita que pasaba al lado estaba guapa. El baldazo de agua fría aún no termina de caer sobre mí. De un comentario a otro terminé diciéndote que yo te veía menor a tu edad. Con una amplia sonrisa me lo agradeciste mientras tu mano tocaba por primera vez mi rodilla. Me sentí electrocutada. Me gustó como se sentían tus manos sobre mí aunque fuera por un segundo. Fue la primera vez que me tocabas espontáneamente y grabe ese recuerdo para toda mi vida. Seguimos bromeando de una y otra cosa. Varias veces aprovechaste para tocarme la rodilla, pasar tus manos por mi espalda intentando calmarme después mientras yo enrollaba mis ojos cuando alguien usaba en vano la palabra libertad. Dos veces mientras me sonreías en broma me empujabas a un lado. Intercambiamos un par de sonrisas cómplices mientras platicábamos. Te metiste en mi espacio personal como quien lo ha hecho toda la vida y se sintió natural. Me hicieron ver que has sido el primero de ese grupo de hombres con los que me reúno a complotar por la libertad que lo hace. Nota que con varios de ellos nos tenemos mucha confianza. Tambien eres el primero que quiero que siempre lo haga.
Quisiera saber de dónde tuviste la confianza de
tocarme. No me quejo. Hazlo las veces que quieras en la magnitud que quieras,
yo totalmente dispuesta. Por favor si no
lo harás, si no piensas en mí mientras yo me desvelo escribiéndote. Si solo
serás un amor platónico más, por favor te pido que salgas de mi mente.
Vete de
mi mente. Yo no soy buena para embotellar mis sentimientos, los quiero dejar
salir, los quiero expresar, ¡te los quiero expresar! No sé si te has dado cuenta
lo atractivo que eres, pero quisiera decírtelo una y otra vez todos los días.
Lo haría sinceramente y de la manera que más te
guste. Te aseguro que tengo mil historias que contarte, mil historias que
escribirte, mil historias que escucharte y mil historias que vivir juntos.
Te aseguro que nunca has estado con una mujer como yo: sincera, sin medias tintas y con mucha pasión. Dale, hazlo, agarra mi mano, no te arrepentirás. Pero si decides no hacerlo, por favor sal de mi mente para que otro pueda entrar y con él poder destapar el torbellino embotellado que soy.
Como te comenté antes, con los años he aprendido que gustarle a alguien no me hace peor ni mejor persona, como tampoco no gustarle no me hace peor o mejor persona. Si no soy correspondida –como sospecho que será- eso no me dolera. Cuando te vayas de mi mente serás un sonriente y feliz recuerdo.
Te aseguro que nunca has estado con una mujer como yo: sincera, sin medias tintas y con mucha pasión. Dale, hazlo, agarra mi mano, no te arrepentirás. Pero si decides no hacerlo, por favor sal de mi mente para que otro pueda entrar y con él poder destapar el torbellino embotellado que soy.
Como te comenté antes, con los años he aprendido que gustarle a alguien no me hace peor ni mejor persona, como tampoco no gustarle no me hace peor o mejor persona. Si no soy correspondida –como sospecho que será- eso no me dolera. Cuando te vayas de mi mente serás un sonriente y feliz recuerdo.
Pd: Te
has ganado dos versos de la sabiduría de la Alanis y Head Over Feet:
You've already won me over in spite of me
And don't be surprised if I love you for
all that you are
No hay comentarios:
Publicar un comentario